Debo ser sincera: a veces doy jugo, debo reconocerlo, anoche fui a un recital de no sé qué universidad, estaban los Bunkers, que me gustan mucho, antes de ir pasamos x el bar de rigor, 3 amigos 4 cervezas, yo la única mujer, ibamos pasando frente a los Carabineros y me caí, no se cómo, en 2 segundos al suelo, me ayudaron a pararme, ni mire a los pacos, me reí no mas igual andaba muy loca, así que no me dolio, ahora me duele, cojeo.
El recital, La Floripondio, los Bunkers, el vino, los pitos, los empujones, los gritos, las canciones, despues el charango, las zampoñas y las quenas, el tinku y la saya, la Loreto y el Alexis. Nos vamos a otro bar, mas cervezas, mas música, yo de la mano de mis dos galanes con deditos entrelazados y todo, el amigo rasta de ojos verdes es lindo pero loco, demasiado para esta hora, quiere que nos vayamos a un motel los 3, o mejor los 2, pero él tiene 5 lucas no más, yo no quiero pagar, me niego, mejor me voy con mi otro amigo, su casa es gratis, su cama tibia y su mamá buena onda... nos vamos en la micro y le inventamos a un tipo que somos casados y que tenemos un hijo de 2 años, nos tomamos su cerveza, decimos que estamos enamorados y nos besamos, nos vamos carreteando en la micro, con toda la gente, es extraña la micro y yo estoy muy arriba de la pelota. caminamos por la calle abrazados, en la sombra de un árbol me levanta, me engancha a sus caderas, y contra la pared me besa, se siente bien, me gusta su fuerza, un perro ladra y ladra.
En la casa,- como a las 2- me tomo un tecito con la mamá y nos vamos a acostar, vemos un tributo a Allende, nos tiramos en la cama, el sobre mí, nos besamos, nos hacemos cariñitos puros y castos, en la cabezota, en la carita, y en la nariz, nos vamos entusiasmando... y me duermo, no sé cómo, solo me duermo, lo último que recuerdo fue que nos besamos, parece que ahi mismo me dormí, en su boca, que lata, desperte tan intacta como me acosté.... él dormia en el suelo al lado de la cama.